¡Estoy de vuelta!
No estaba de vacaciones… lo cierto es que he empezado a trabajar, y ahora tengo… TIEMPO 0 para dedicarme a la cocina (así que me alimenta mi madre).
Os traigo una receta buenísima, que podéis comer tanto tibia como fría (a mí me gusta más fría).
Además ésta lleva de todo. Y se pueden poner muchas más cosas… pero por no saturar. ¿Y vosotros cómo las hacéis?
Aquí va la receta, que es rápida, sencilla y muy, muy buena:
Ingredientes:
4 huevos
1 tomate
Bacon en tiras (un paquete pequeño)
Queso rallado (yo uso los 4 quesos para fundir)
300 ml de leche evaporada (se puede sustituir por nata para cocinar)
1 rulo de queso de cabra
1 placa de masa quebrada (o bien tenéis en el recetario la base para elaborarla)
Pimienta
Hierbas provenzales
Preparación:
Precalentamos el horno a 180º.
Forramos un molde con la placa de masa quebrada (yo usé la tartera). Lavamos el tomate, lo cortamos en rodajas y repartimos sobre la masa, encima cortamos en rodajas el queso de cabra.
En un bol mezclamos los huevos, la leche evaporada y añadimos el queso rallado, el bacon y las hierbas provenzales. Removemos muy bien y vertemos sobre el tomate y el queso de cabra.
Horneamos durante 20 minutos o media horita con calor SOLAMENTE DESDE ABAJO, así no se quema la mezcla y la masa quebrada queda crujiente.
Sacamos la quiche del horno cuando esté doradita, y cuando esté tibia la podemos desmoldar.
NOTA:
- No ponemos sal porque los quesos ya llevan suficiente.
- Pinché la masa con un tenedor, porque aunque el paquete ponga que no sube… ¡SUBE! y a nosotros nos interesa que quede plana y crujiente.
¡A DISFRUTAR!
Maria.
todo tiene muy buena pintas saludos vero4casa
ResponderEliminargracias por el comentario y por la visita a mi blog!! :) Espero que vayas descubriendo recetas que sean de tu agrado
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